Detrás de El buen escritor

¡¡¡¡Bieeeennnn!!!! Ya está aquí el esperadísimo Making off (o el Así se hizo o el Detrás de las cámaras, como prefiráis) de El buen escritor.
Es cierto que este corto nos ha costado bastante; muchos problemas, uno tras otro, nos fue minando un poco la moral y al final no todo salió como se preveía. Pero está claro que todo cuenta como experiencia, aprendemos de ella e intentamos mejorar para que el siguiente proyecto salga mejor, y por eso uno siempre debe sentirse orgulloso de lo hecho aunque el resultado no sea el esperado. Tampoco se debe olvidar que aunque el cansancio y la tensión estuvo presente durante toda la grabación, en nuestra memoria quedaron momentos dignos de ser recordados por nosotros y disfrutados por todos vosotros. Pily ha hecho una inmejorable recopilación de esos moentos, no están todos los que fueron (problemas de longitud) pero los que sí están no tienen desperdicio.
Disfrutadlo, merece la pena reirse un poco de vez en cuando.

Feral

Siempre hemos ansiado ese primer contacto con seres extraterrestres. Pero a su vez hemos temido las posibles intenciones hostiles que dichos seres puedan albergar, quizá esas ansias de dominación o incluso de extinción sobre la raza humana. Pues bien, si ese ha sido tu sentimiento, si esa es tu preocupación, si ese es el temor que respecto a este tema te arde en el corazón, Feral es la novela que te aconsejo.

Y es que Feral va precisamente de eso, de una raza alienígena que comulga con la muerte y cuyo arraigado credo es la extinción. Pero frente a ellos se despliega un variado abanico de conductas humanas presente en los propios colonos que se enfrentan irremediablemente a su final y cuyo instinto de supervivencia hace que salga tanto lo mejor como lo peor de cada uno. Básicamente eso es Feral, la cuarta novela del genio del terror psicológico David Jasso y la primera que toca de cerca la ciencia ficción; lo cual, para el aficionado de a pie de este género, es de agradecer. Una buena incursión, igual de buena que la de los ferales en la colonia minera que pretenden aniquilar. David ha creado en Feral una raza que no parece destinada a un solo libro. En mi opinión, la base sobre la que se sustenta esta civilización alienígena está tan definida y es tan impactante que sería una lástima en los tiempos que corren no explotar más a estos chicos malos llamados cariñosamente ferales.
Sobre la novela en sí comentar que es bastante entretenida, temporalmente lineal aunque con pequeños saltos que ayudan a descubrir que ocurre en varios sitios en un mismo instante, y sobre todo bastante real. Vale, hablamos de ciencia ficción mezclada con terror, pero lo importante es que lo que sucede no es algo sin sentido salido de la enferma mentalidad de un psicópata, sino que atiende a un razonamiento lógico dentro del panorama fantástico en el que se desarrolla, y eso, señores míos, la hace convincente.
Una pequeña anotación más antes de acabar. Pese a los monstruos alienígenas y a ciertas escenas espeluznantemente descritas propias de un infierno dantesco, esta novela se acerca más al terror psicológico que al tradicional de monstruos ya que se centra esencialmente en el entorno de los personajes, en sus miedos, en sus esperanzas, todo ello aliñado por una atmósfera opresiva que facilita el desarrollo de ese temor.
Lo dicho, una novela bastante aconsejable si te va este género, y para mí una de las mejores que ha escrito David Jasso, por eso me ratifico en que sería una pena no ver a los ferales prodigarse de nuevo en cualquiera de esos medios que habitualmente nos sirven de entretenimiento.
Gracias David por este rato que me has hecho pasar.

El corto de NECRÓPARIS

Pues aquí llega el nuevo corto de NGC ficción!, el tercero en su lista particular (cuarto si contamos la presentación de la editorial que simulaba una encuesta callejera) y segundo de la mía tras Fragmentos de Burbuja. Y es que este corto nos ha traído por la calle de la amargura desde el principio; pero paso a paso.
NECRÓPARIS, de Fernando Cámara (director y guionista de películas como Memorias del Ángel Caído y Más de mil cámaras velan por tu seguridad), es el tercer título de esta editorial y obstenta el honor de ser la novela que inaugura la colección de terror ¡¡¡Bieeennn!!! El caso es que al tratarse de este carismático género queríamos dotar a nuestro trabajo de esas pinceladas espeluznantes que todo buen corto de terror que se precie debe tener, y rescatamos a tal efecto la idea de adaptar un minirelato mío que en su día aparecio en este blog en los ciclos Halloweenianos, El buen escritor.
Hemos creído conveniente suavizarlo un poco respecto al relato dado su carácter promocional, incluso así hemos sufrido bastante para poder hacerlo una realidad, por eso mismo nos referimos a él cariñosamente como "el corto maldito". Vedlo primero y después continuad con la lectura del post, más que nada por no desvelaros algo.

Una vez acabado parece mentira la cantidad de trabas con las que nos hemos encontrado. Todo parecía sin problemas al principio, disponíamos de actores, de una idea y un guión, y sobre todo de tiempo. Pues como a veces ocurre en estas cosas todo empezó a torcerse, los primeros candidatos a interpretar los papeles lo fueron rechazando por diversos motivos y yo me encontraba inmerso en la recta final del Alien Bull, con lo que el tiempo a dedicar a este proyecto era inexistente. Conseguir el equipo artístico fue todo caos y negativas hasta que José Luis Mora (coordinador de la iniciativa Cortos con Ñ) nos puso en contacto con Azucena Alonso, una persona y una actrz genial que se entusiasmó con el proyecto y se implicó en él desde el principio. Tras tantear a posibles candidatos al papel masculino (fijaros nuestra desesperación que hasta salió por ahí mi nombre), tuvimos que recurrir a un casting para conseguirlo, encontrando a Luis Filgueira para el papel de agobiado escritor azuzado por una insoportable e impertinente editora (la propia Pily B en "su papel"). Pero aún quedaba mucho.
Creíamos conveniente quedar algún día antes para ensayar un poco y probar el mecanismo de la mesa, pero de nuevo mi falta de tiempo (tras el Alien Bull tocaba acabar los trofeos Nocte, de los cuales pronto hablaré por aquí) hizo que fuese el mismo fin de semana que grabábamos el que construyera la mesa maldita y nos enfrentásemos a toda la tarde del sábado de rodaje y a una jornada dominical de casi dieciseís horas. Ni que decir tiene que el cansancio general (empezando por el mío) y la falta de preparación y planificación provocaron errores irreparables que hemos intentado disimular en el montaje final.
Javi se encargó del sonido directo, de crearnos la banda sonora, de mejorar el sonido del corto en su montaje final y de controlar la manivela del mecanismo de la mesa, así que no me queda más que agradecerle tanta involucración en este proyecto. A Sonia otro tanto de lo mismo; making off, chica para todo y humilde receptora de una lluvia de sangre que haría las delicias de las mentes más depravadas..., gracias por estar ahí.
Como habéis visto el corto no está mal para los medios que disponemos, pero sí es cierto que podría haber sido fácilmente mejorable con un poco de planificación previa y algo más de dedicación. Aun así, en nombre de todos los que hemos trabajado en este proyecto, esperamos que lo hayáis disfrutado.