¡Qué alegría de Catedral!

La Catedral del Zodiaco toda ella majestuosa... ¡Qué poco duró, madre!

Aunque a estas alturas ya sea un secreto a voces y parezca raro que alguien no se haya enterado, era de rigor dar a conocer la noticia a través de este blog; más que nada porque siempre existen los rezagadillos que tardan en enterarse de estas cosas. Pues sí, la Catedral del Zodiaco participó por fin en la edición número treinta del Descenso Pirata del Tajo, y supongo que porque la vieron original, o porque sus colores engatusaron al jurado, conseguimos alzarnos hasta la máxima posición ganando unos buenos eurillos y, lo que a nivel personal vale más por lo que representa, el título de Pirata Mayor de este año.

¿Y este energúmeno es el "cerebro" de todo esto? ¡Pues que El Señor nos pille confesaos!

Es cierto que mucho ha sido el trabajo, pero eso no ha sido exclusivo de la Catedral, muchas embarcaciones también se lo habían currado en un tiempo y esfuerzo similar. Hace varios años que se me ocurrió la idea, un proyecto imposible de realizar en casa y que este año, gracias a la colaboración del taller de Aranjuez, sí he podido llevar a cabo; de ahí mis ilusiones y esperanzas (decir que no se me había pasado por la mente ganar sería de hipócritas). Pensaba que una posición justa sería entre los tres primeros, pero cuando vi por primera vez “Hoy cumplo 30”, con su marioneta pirata gigante, automáticamente me relegué a la segunda posición. Con “Fantasías animadas”, una barcaza ambientada en La sirenita con casi treinta muñecos, mi salto me llevó al tercer puesto.

"Hoy cumplo 30", con peaso marioneta incluida, la principal candidata a mi gusto

"Fantasias animadas", veintimuchos muñecos en una orquesta que no acabaron de dar la nota esperada.

Había más, embarcaciones elaboradas y bien hechas que podían dar guerra pero que la intuición, mala en este caso, relegaba a no más de un tercer puesto. “Bee Movie”, “Jarcos, los guerreros del agua”, “Los Bribones del Tajo, con su barco buscan trabajo”, y otras similares conforman ese grupo de embarcaciones trabajadas y aparentes que cada año dotan de calidad y originalidad al descenso.

"Los Bribones del Tajo...", un buen bergantín que pagó su falta de originalidad pese a su buen acabado.

Pero como siempre he dicho la opinión del jurado es subjetiva, y saber qué les atrae de una embarcación a cada uno de ellos es un misterio. Cuando mandaron a “Los Bribones” a los últimos premios, todos empezamos a temblar. “Fantasías animadas” salió sexta y “Hoy cumplo 30”, principal candidata a mi gusto, quedó cuarta. La “Paella” y “Jarcos” sorprendieron con su tercer y segundo premio. Entonces la emoción y las lágrimas ya estaban preparadas para el desbordamiento.

"Jarcos...", estos guerreros del agua pelearon fuerte y se hicieron con el segundo puesto.

"La Paella" fue una sorpresa inesperada, llegaron el sábado por la noche desde Valencia y se comieron el tercer puesto.

Sobre esta edición, mejor dicho sobre mi participación de este año, debo decir unas cosillas. Me siento afortunado, y no sólo por ganar, sino porque ha sido el año en que más amigos han participado tanto en la construcción de la Catedral como en su uso. Me han apoyado al cien por cien pese a hacérselas pasar canutas. Han puesto y quitado tornillos hasta desriñonarse, han pintado vidrieras hasta intoxicarse, han hecho piezas de cartón hasta hartarse, y han pintado la Catedral hasta rendirse al sueño o incluso aguantando hasta el final. Un sin fin de perrerías que no sé si recordarán como grata experiencia o huirán de mí el día que les “invite” a participar en otro loco proyecto. Yo desde luego no me he podido sentir más arropado, y sé que quizá pueda haber abusado de ellos, de su amistad… Bueno, si así ha sido lo siento.

Javi y Pily, J., Raúl, Paco, Jose y Mª Jose, Alfonso, David, Gonzalo, y como no, el mayor apoyo de todos sin el cual no hubiese existido la Catedral, mi adorable y siempre comprensiva Sonia (vale, ya pagaré, ya).

A todos ellos, gracias piratillas.

A esos briboncillos que desde un principio creyeron en la Catedral de forma incondicional, a esas porritas matutinas, a quienes de corazón ofrecieron su ayuda y se la negué, a quienes no se la negué, a aquellos que me han apoyado desde el principio, con miedos y dudas sobre la estructura (todos las teníamos) pero aun así esperando con todo el alma que funcionase, a quienes ofrecían consejos, a quienes nos dejaron su plataforma como mesa de trabajo… A todos ellos, a toda la gente de Aranjuez que como siempre se han portado genial y que como algún nombre se me baila prefiero no decirlos porque seguro que alguno se me escapa, a todos ellos que saben de sobra quienes son, gracias de corazón.

"Bee Movie", las llamativas abejitas de porespan polinizaron el quinto lugar.

"Tajoterapia", más sencillo no podía ser: además de un buen puesto se llevó un incómodo dolor de piernas.

En fin, este año no tengo lista de participantes ni de afortunados (sólo la de unos pocos, los primeros), por no tener no tengo ni siquiera fotos de todos (eran 33); pero de algunas sí. Aquí os dejo fotos de ellas y un par de vídeos. El primero uno cortito y muy chulo realizado por uno de los tripulantes de la Catedral, J.

El segundo me dio problemas de copy right por la canción de fondo (What a Wonderful world, de Los Ramones), así que tras adaptarlo a su nuevo tema, Bon Jovi nos deseó un buen día ¡Y vaya que lo tuvimos!

Espero que os guste, y a los que no han visto fotos les recuerdo el enlace de la derecha, con montaje de vídeo incluido (o eso espero).

"Plataforma rodando y los roedores piratas nos vamos mojando" fue uno de los gatillazos al no funcionar correctamente; aun así se llevó el septimo puesto.

"El Apollo de limón con destino Plutón", siempre que una barcaza tenga que ver con naves espaciales, me encanta.

"El hidrotajo que flota para abajo", un simpático hidroavión que no hizo aguas.

"La Gheisa". Chinos, chinas, y dragones que echan humo; curiosa.

"Michael Jackson está enterrado en el Tajo, y si te descuidas te hunde para abajo". La actualidad también está presente, aunque sea con humor... negro.

Esta simpática muerte no hacía más que seguirnos... Sí, sí, simpática y todo lo que tú quieras, pero daba un mal rollito que no veas.

"Se nos casa la rubia", poca sofisticación pero mucho sentido del humor en esta boda con sorpresa fálica incluida.