Marchando una de pinchito cristiano
Ayer, viernes, como mandan los cánones no trabajé por la tarde, así que como es costumbre últimamente me dispuse a andar mis treinta minutitos de gloria que me encaminarían directamente a la Plaza de Lavapiés, allí cogería el metro y el cercanías para encontrarme con Sonia e irnos juntos a casa, como cada viernes.
Pero esta vez no fue así, mi monótono caminar se vio interrumpido por un alegre espectáculo al que se le perdonaba el sacarme de la rutina. Cuando llegué a Callao vi mucha gente, como cuando se suceden las manifestaciones; además, el ruido de tambores y la visión de pancartas y pendones me hizo pensar que precisamente era eso, alguna asociación que se manifestaba reivindicando a saber el qué, seguro que justamente, pero a mí lo que me importaba era cruzar Preciados cuanto antes, para no perder mi ritmo. No tardé en darme cuenta que lo que allí había no eran manifestantes, sino gente disfrazada, algunos de moros, otros de cristianos… ¡Joder, Moros y Cristianos en la calle Preciados! ¡En Febrero!
Tras hacer un par de fotos con el móvil (alabada sea la tecnología), me dispuse a enterar del por qué de tal espectáculo. Cierto, sí, podía haber preguntado a uno de los guardias, o a uno de los señores gorditos y barbudos vestido con túnicas, pero habiendo un grupo de lobitas a mi alcance, para qué planteármelo. La de la izquierda de la foto me dijo con una encantadora sonrisa que todo era consecuencia del Fitur (Feria Internacional del Turismo), que había congregado a distintas asociaciones de moros y cristianos por aquello de la propaganda turística, y que ellas venían de Alcoy; la fotico pertinente y a seguir Preciados abajo.
Lo cierto es que todo el mundo, foráneos o paisanos, se hinchó de hacer fotos, y fijo que el fin de dar a conocer este gran espectáculo se cumplió.
Por mi parte llegué a Sol con un retraso de cinco minutos, algo que rompía mi plan, así que aborté la marcha y el metro fue mi socorrido medio para llegar a tiempo.
No me importó, la verdad, porque un espectáculo así no se ve todos los días, pero lo de andar…
Etiquetas: Eventos
7 Comentarios:
Joooo, me encantan tus paseos, ¿como lo haces para montartelo tan bien?.
En cuanto a lo de merecia la pena lo dices por el plumero naranja con patas de palo, ¿verdad?.
Qué bien te lo pasas, niño!!!!
Son fotos del móvil? están guay!!!
Lo de las "lobitas" te ha quedao mu castizo, oyessss....pendón, más que pendón ;-)
¡Menudas caminatas! Y qué suerte tienes, puñetero. Pensar que cuando salgo yo a dar vueltas lo más emocionante que me pasa es pisar una caquita de perro...
De lobitas nada, te lo aseguro. :-(
Juas, juas, cóooomo moooooooooola, chiquillo. Como dice Sonia, a mí también me encantan tus paseos.
Y las lobitas, mú monas, mú monas, y las fotos, mú monas, mú monas... ;-)
Besicooooos!! (¿Moro o Cristiano? ;-P)
Sonia, los paseos están bien, pero acaban cansando, recuerda. Y lo de que merecía la pena... Claro, por supuesto que era por el plumero con patas, ¿he dicho yo lo contrario? Aquí nadie ha hablado de lobitas, estooo... ¿he dicho lobitas? No, para nada...
Sí Edén, experiencias sociales que se llaman... Y sí, son fotos hechas con el móvil, y la verdad es que no salieron nada mal; no tienen la calidad de cámara de fotos pero son bastante aceptables.
Al señor anónimo en este caso no le digo nada.
Number one, ¿y no te has planteado que en vez de caquitas de perro sean caquitas de lobitas? No es que sirva de mucho consuelo, la verdad, pero algo es algo... Sólo es casualidad, un lugar adecuado a una hora propicia... Eso de no trabajar los viernes por la tarde también cuenta en este caso.
Pily, por no repetirme en la contestación, te diré que Cristiano. Eso sí, las pintas de los moros de estas fiestas suelen molar más... Estooo, creo que las lobitas eran monas, ¡digo moras!
Un besote.
Ostras, que la dao fuerte con las lobitassss....tranki, que hay luna llena ;-)
Besos
¡¡¡AAUUUuuuuuhhhhhh!!!
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