Clásicos a lo grande
No hace mucho fue la llamada Noche en Blanco aquí, en Madrid; una noche cultural inventada por los parisinos y que más de una capital europea ha adoptado. El evento en cuestión consiste en cerrar al tráfico de coches varias calles céntricas para permitir la fluidez del contingente humano que esa noche se vuelca en las calles, y así poder asistir con total libertad a las expresiones culturales diseminadas por gran parte de la ciudad. Pues bien, como era de rigor, allí estuvimos.
Pero no, no os preocupéis que no voy a hablaros de lo que hicimos esa noche, de cómo fuimos de un lado a otro sin llegar a ver los espectáculos que queríamos, ni de cómo nos tragamos un vídeo experimental sin pies ni cabeza, o como el agua de lluvia nos “humedeció” en algunos momentos con su chirimiri…, no. Sólo quiero hablaros de un descubrimiento que para mí fue lo mejor de toda esa “fantástica” noche cultural, el Cine Estudio del Círculo de Bellas Artes.
Allí nos acoplamos para ver un bloque de cortometrajes de la ESCAC (Escuela Superior de Cinematografía y Audiovisuales de Cataluña) que a los tres que íbamos nos gustaron, y ya de paso, como ocurre en estos casos, me hice con un pequeño librito de la programación de Septiembre que no leí hasta un par de días más tarde; que acierto.
Resulta que cada mes, o eso me pareció entender, proyectan un pequeño número de títulos dentro de un ciclo sobre clásicos de la ciencia ficción. Y lo mejor de todo es que si lo leí el lunes 24, empezaba al día siguiente y se extendía durante otros dos días más; vamos, de coña.
Este mes proyectaban cuatro pelis que ya había visto, pero no es lo mismo la tele que un cine, en eso creo que estamos todos de acuerdo, y pese a ser subtituladas debo reconocer que ha sido toda una gozada.
Por incompatibilidades en el horario no pude ver El tiempo en sus manos, una verdadera pena porque la he visto varias veces y sí me hubiera gustado verla en pantalla grande; pero las otras tres sí las pude ver.
La humanidad en peligro, todo un clásico de los años cincuenta donde unas hormigas mutan como consecuencia de las pruebas nucleares hechas por los americanos en el desierto; como consecuencia de esta mutación alcanzan tamaños de entre tres metros (las obreras) a cinco (las reinas aladas). Decir que me gustó no sería una novedad, cuenta entre mis grabaciones. Pero sí me gustaría destacar la buena impresión que el blanco y negro de esa peli me causó, y es que de repente me di cuenta de los genios de la iluminación y la fotografía que por entonces ya había.
2 Comentarios:
La verdad es que a mi también me molan, aunque yo sí que no puedo sacar tiempo de ningún sitio.
Casi todas las que has mencionado las he visto y las recuerdo, mas o menos, decentemente.
Aprovecha mientras puedas. Seguro que tú a todo esto le sacas algún partido!
Besotes.
Pues no, no voy a aprovechar mucho porque ya no hay ciclos de ci fi en el Cine Estudio. Yo pensaba que tenían un ciclo y cada mes proyectaban algunas pelis, pero lo que pasa es que cada mes tienen un ciclo diferente y de momento no hay más cifi.
Al menos lo que sí tienen son ciclos de cortometrajes, que aunque no son de cifi también molan verlos en pantalla grande y no en el dvd de casa.
Un besote.
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